Sangrías y sanguijuelas

Me comentaba hoy el Manco que se había pasado la noche leyendo acerca de sangrías y sanguijuelas. Al parecer, es algo que suele hacer cada vez que llegan en el temario a la poesía del Barroco (el Manco, ya iba siendo hora de decirlo, ejerce de profe de literatura), y concretamente a aquello de "Herido el blanco pie del hierro breve, / saludable si agudo, amiga mía". Así, para mi relativa sorpresa, mi buen amigo me acababa de convencer de que todavía hoy las sanguijuelas eran utilizadas en ciertas cirugías, por ejemplo, en la reconstrucción de arterias, con resultados altamente positivos.

Sin embargo, otra cara, esta bastante más cercana al descrédito, es la que he puesto cuando el Manco, muy circunspecto y para nada titubeante, me ha revelado el nombre de la especie concreta de sanguijuela utilizada en la práctica médica: MasColellus medicinalis. Yo, que sé de su natural socarrón y de las consecuencias habituales de sus Xtreme tour de force lectores, no me he cortado un pelo y le he espetado:

-¿Quieres decir que no se te ha vuelto a hacer la noche clara y el día turbio con tanta lectura?

- No, no, lee, lee.

- Pues sí, parece un artículo solvente. ¿Y tiene algún otro efecto en la práctica terapéutica?

- Según explica este otro artículo, te hace pagar cinco euros por día de estancia en centro hospitalario como nuevo paso adelante en la privatización de la sanidad catalana.

- ¡Ah, ya! ¿Y quieres decir que esto es beneficioso para el paciente?

- Pues no sé, pero no se puede negar que actúa según le dicta su naturaleza.

Doncs això, benvolgut conseller...