martes, 23 de abril de 2024

Palamós

Dedicatòria de Joaquim Comes
Insignificant és la vida i el racó de la terra on es viu.
(Marc Aureli)

Palamós en carnaval sota una escorça de núvols negres. mentre els vilatans -temorosos per la sort de la rua- guaiten el cel recercant brins de llum esfilagarsada, erro amunt i avall pels carrers estrets del nucli antic, parant orella a les converses sense tafanejar, capolant-lesremovent-les, en va intent de desxifrar el sofregit del seus purs sons, la seva veritat marinera.

carrer Major, església de Santa Maria i la placeta de paviment maó i dibuix de bresca que dona al mirador sobre el port i la extensa badia. una vista, d'ordinari, d'una serenor lluminosa, que avui se'm fa estranyament inabastable, inquietant, atordidora. torno enrere i voltejo mandrós, incapaç d'orientar-me en aquest traçat amb pujades, racons i trencalls inesperats, on les dreceres són el cor del laberint i tot convida a fugir per les gateres de la imaginació: sí, ja havia estat aquí, en un temps en blanc i negre, en una cambra amb tocador, rentamans i galant de nit, potser sota la pell d'un jove viatjant noucasat, ajagut amb les pupil·les fixes en el sostre de la matinada mentre ella dorm plàcidament. a la vida -com a les novel·les- res no és nou, sinó tronat i mudadís a l'hora, i mai fruit de l'atzar.

sábado, 9 de marzo de 2024

autorretrato en la orilla

Quisieras ser noche y no pensar
(A. Alegre Heitzmann)

noches de invierno en que las sombras
se aferran a la vida
mientras la luna siembra de cristales
el enigma marino:
¿te cubrirás ojos y oídos
para ahondar en la percepción de la realidad
allende el tiempo?

huellas en la arena
   borradas por la marea,
esqueletos de vagones
   varados en vías muertas,
reloj solar enloquecido
   iniciando la cuenta atrás:
imágenes en las que te viste reflejado
hasta lo obsesivo y que hoy
apenas significan nada.

lunes, 19 de febrero de 2024

imagine

imagina un mundo en que el diálogo fuera el paso previo para la contienda -es fácil si lo intentas-; donde la generosidad agraviara, la felicidad hiriera y la mentira fuera la única religión verdadera. 

imagina el día en que, prohibido el arte por degenerado, contemplar el arcoíris se penara con la cárcel -no es difícil de creer-. "¡LIBERTAD!" clamaría el eslogan de un nuevo refresco energizante, mientras escuelas y hospitales serían marcados como blancos estratégicos. 

jueves, 25 de enero de 2024

Tamariu

en el centro de la fiebre, los escalofríos, la pesadez, se arremolinan las ideas, como desasidas de la mente, ahora endebles, luego torpes, enredadas, siempre infructuosas en la interpretación de una novela que, de tan previsible, resbala de las manos... y es que hoy -ten cuidado con la ironía, algún día se volverá en tu contra-, impedido para deletrear siquiera el temblor de la espléndida luz que reina sobre patios y galerías, aletea en ti el temor al momento en que la existencia apenas sea agonía, lucha inmisericorde por un día más de dolor; en que agotados afectos, emociones y argucias -supernova espiritual reintegrada al cosmos de la materia-, te des de bruces con la única verdad: la misma que a su vez aguarda al gato que, a escasos metros de tu escuálido dramón, se tiende cuan largo es sobre las tejas de la finca vecina, y en cuyo porte abúlico pero augusto -viva imagen de la pachorra cósmica-, intuyes una lección para la que todavía no estás preparado.

Ruleta rusa