Pero no debo herirte...
Pienso en amor y algo tus labios hiere,
pronuncio luz y lejos gime el día;
algo que mata el corazón oculta,
algo que entre el amor yace y de pronto
puede matar, herir cuando no quiero.
Cuántas veces he dicho vida y cuántas
tal vez muerte escondía sin saberlo,
cuántas habré cegado la esperanza,
cuántas, creyendo luz, habré arrojado
palabras, piedras, sombras, noche y noche
hacia el sol que amo tanto.
("Pero no más allá", J. Á. Valente -frag.-)
Nadie: cuando quieres sabes llegar, y calar, hondo.
ResponderEliminar(Penélope)