viernes, 21 de marzo de 2014

La herida de Penélope

Musisz opiewać okaleczony świat.
Patrzyłeś na eleganckie jachty i okręty;
jeden z nich miał przed sobą długą podróż,
na inny czekała tylko słona nicość. [...]
Opiewaj okaleczony świat
i szare piórko, zgubione przez drozda,
i delikatne światło, które błądzi i znika
i powraca.

 (Debes alabar al mundo herido.
Mirabas yates y barcos,
uno de ellos tenía que emprender un largo viaje,
al otro le aguardaba la salobre nada. [...]
Alaba el mundo herido
y la pluma gris perdida por un mirlo,
y la luz delicada que vaga y desaparece
y regresa.
-"Intenta alabar al mundo herido", Adam Zagajewski, frag.-)

2 comentarios:

  1. Sí, pero para eso antes hay que aprender a mirar. Quizás sea ese el sentido de la poesía...

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    1. Y no sólo de la poesía, sino de cualquier otra forma de arte. La mirada, o la percepción, en general. Creo recordar algún escrito o entrevista en que Chillida comenta la íntima relación existente en su obra entre el percibir y el conocer.

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